20.04.1992
nuevamente mi Voluntad, para que puedas hacer conmigo lo que plazca a Tu Corazón. ¡Qué delicia estar en Tu Presencia y que se me permita caminar con Tu Majestad! ¿Qué puedo yo devolverte por todas las bendiciones que has derramado sobre mí? Sólo tengo que levantar mis ojos al Cielo y Tú te inclinas para escucharme; y cuando invoco Tu Nombre, Tu Majestad desciende desde Tu Trono. Tú que eres Soberano en los Cielos y en la tierra, para estar conmigo en mi habitación y hacerme compañía. Yo vengo a ti. La miseria Me atrae, la pobreza Me seduce; así es que no te agobies enriqueciéndote. Colócame, a Mí tu Dios, como un sello en tu corazón, y Yo continuaré, Mi bienamada, demostrándote Mi dulzura hacia ti. una fortaleza cuando soy oprimida y calumniada, una fortaleza cuando los tiempos son difíciles. Mi Dios es mi Escudo protector. Satanás puede afilar su espada o doblar su arco y apuntar hacia mí, pero mi Dios, mi Abba siempre tan Tierno, estará presente y hará huir al diablo. Dame amor sin límites. Los estoy mirando a todos, desde el Cielo, para ver si tan sólo uno de ustedes Me busca sin interés personal. ¡Qué alegría y qué felicidad recibo cada vez que oigo exaltar Mi Nombre!, pero muchos se han apartado, muchos están corrompidos por el pecado. Deja que Mi Corazón se regocije con la pobreza; deja que Mi Corazón se regocije con un amor sin intereses personales. Dame, hija, como Yo te he dado. No te presentes ante Mí con las manos vacías. Ofréceme sacrificios, sé generosa. ¿Acaso no he sido Yo generoso contigo? Dame ahora, como Yo te he dado. Ofréceme sacrificios para apaciguar Mi Justicia. 1 Edifica lo que te he dado a construir. 2 ¡Oh, Vassula! ¡Ofréceme todo para mitigar Mi Sed! Pon tu fe en Mí. Da Mi Himno de Amor a aquellos que esperan Mi Palabra; da para que todos los habitantes de la tierra puedan oír Mi Grito Misericordioso. 3 Yo no puedo ignorar las súplicas de Mis hijos. Entonces, continuarás tu ministerio ante Mí y abriré tu boca para llenarla de Mis Palabras para glorificarme, y a través de ti, produciré una Imagen visible de Mí Mismo. Yo tocaré los corazones de Mi gente, e incluso las personas que nunca Me conocieron, Me bendecirán. Despréciense a sí mismos y Yo no los rechazaré. Yo, Yahvé, los salvaré. 1 Yo dudé. No sabía lo que Dios quería decir, exactamente 2 Yo todavía no entendía 3 Finalmente comprendí que más que nunca, tengo que continuar dando testimonio y haciendo conocer los Mensajes de Dios |