9.01.1990

Yo soy el que más te ama, permanece en Mi favor amándome y haciendo Mi Voluntad. Dispón tu corazón para completar Mi Obra. Comprende todo esto, hija, y permíteme utilizarte. Yo te amo. Conságrate a Mí y Yo te levantaré alimentándote, impregnándote con Mi Sangre. Actúa con amor, habla con amor, piensa con amor, sé Mi reflejo en cada manera. Todo lo que pido de ti es devoción, amor y sinceridad. Trátame como a tu Santo Compañero, cuéntame entre los tuyos, dime a menudo, cuánto Me adoras. Yo soy un Dios Celoso y quiero oraciones incesantes. ¿Ves? Flor, Yo soy el Vigilante, Cuidador de Mi Jardín y, aunque lo encuentre descuidado y seco, Yo te prometo que lo reviviré, y todo por Mí Mismo. Yo les revelaré a todos Mi Rostro y muchos Me reconocerán y Me adorarán con sacrificios y oraciones. Sí, muchos se volverán hacia Mí y, al verme, comprenderán Mi Amor y Yo los sanaré. El Amor los ama a todos. Yo soy El que realiza maravillas y escucha a cada uno de ustedes, pequeño o grande, justo o injusto, devoto o pagano; Yo escucho a cada uno. Yo los bendigo a todos.