|
18.08.91 -¡Oh, Señor! yo estoy perturbada, hasta el punto de muerte. Hoy es mi Getsemaní; mi alma está maltrecha y afligida. Satanás me ha escogido definitivamente como blanco para hacerme pedazos. Él me traspasa despiadadamente de parte a parte. Yo soy el objeto de mis perseguidores, entonces, ¿dónde está mi esperanza? -En Mi Sagrado Corazón, Mi paloma. Tu aprisco es Mi Sagrado Corazón. Vuélvete a Mí y Mi Espíritu te consolará. Ofréceme tus dificultades y Yo las esconderé en Mi Corazón. Yo haré buen uso de ellas; liberaré almas del purgatorio... entonces, olvida tus problemas de estos días y reposa en Mí tu Dios. Yo soy un Océano de Paz. Dame, hija, todas tus tribulaciones y Mi Paz las aniquilará. Toma Mi Paz, Mi cordero. Yo te amo; Yo ofrezco la Paz. Reposa en Mí. Ahora ve en Paz. 19-08-91 -Señor, cuando los artesanos de la paz 1 guiados por el Espíritu Santo trabajan por la paz, sembrando los granos que llevan buenos frutos, ¿por qué se les dice que guarden silencio? ¿Por qué son perseguidos? ¿Por qué no se les cree? -Porque se les compra 2 como artículos costosos por los mercaderes. El racionalismo empaña el espíritu, embota el discernimiento y mata la humildad. Como Sodoma y Egipto, ellos están rechazando todo lo que viene del interior de la Iglesia, el poder interior que es: Mi Santo Espíritu. No obstante, Yo te daré Mi Fuerza para proseguir, pues ésta es Mi Voluntad. 1 aquellos que evangelizan, difundiendo la Palabra de Dios para volver al mundo a Dios y reconciliarlo con Dios 2 los incrédulos |
