INICIOINDICEBUSQUEDA
DOCE BIENAVENTURANZAS


14.04.91

"Bendito sea Yahvé
que produce maravillas de amor para mí"
(Salmo 31,21)

La paz sea contigo. Ahora dime, discípula: ¿estás contenta de tenerme como tu Director Espiritual?

Sí, Señor, más que contenta.
¡Estoy aprendiendo muchas cosas, directamente
de Tu Boca, así como otros!

¿Te gustaría escribir?

Estoy lista para servirte,
mi Dios, prepárame y abre mi oído
para escuchar sólo Tu Voz.

Entonces, escúchame:

- Benditos son los que trabajan por la Paz: prosperarán en Mi Paz e irradiarán Mi Luz por siempre y para siempre.

- Benditos son los que tienen compasión: verán la Misericordia en el Día del Juicio.

- Benditas son las almas generosas que comparten Mi Cáliz: serán llamadas herederas de Mi Salvación.

- Benditos son los que se desposan Conmigo: este mismo gozo que Yo siento como Esposo, ellos también lo sentirán el día que Me vean Cara a cara.

- Benditos son ustedes que no han aceptado ningún otro testimonio, excepto el de la Única y Sola Verdad, que Yo Mismo les he dado. Yo les digo: ¡Vengan! Vengan a Mi Reino y compartan Conmigo, todo lo que tengo.

- Benditos son los que no se diferencian entre sí mismos, bajo Mi Santo Nombre, sino que demuestran su unidad mediante su humildad y amor: serán llamados Pilares y Fundamentos del Santuario de Dios.

- Benditos son ustedes que creen sin haber visto: alégrense por la Gracia que reciben de Mi Padre y oren por aquéllos que todavía no han recibido esta Gracia.

- Benditos son ustedes que aceptan ser flagelados, humillados y clavados Conmigo en la Cruz, y que llevan las marcas de Mi Cuerpo en el suyo: tendrán su lugar en el Cielo para recibirlos y su recompensa será grande.

- Benditos son los que guardan Mi Santo Nombre: cuando clamen y pidan en Mi Nombre, Yo los escucharé.

- Benditos son los pequeños que Me alaban y Me adoran: haré grandes cosas en ellos.

- Benditos son los fieles que observan Mis Mandamientos y no cambian ni un acento de lo que ha sido escrito en Las Escrituras: de ellos es el Reino de los Cielos.

- Benditos son ustedes, Mis corderos, que por Mi causa son perseguidos como animales de caza, por lobos voraces, porque compartí su comida, lado a lado con ustedes. Yo les digo que todos sus sufrimientos no son en vano. El Padre ve todo esto y toma en cuenta los actos de cada uno. El castigo sobre los que han perseguido a Mi Espíritu Santo, será más severo que el castigo que Él envió a Sodoma y Gomorra.

Por lo tanto, permanezcan despiertos. Nadie sabe el día y la hora de Mi Venida; su Rey vendrá pronto. Aquél que han estado esperando durante tanto tiempo, vendrá repentinamente sobre ustedes, así que tengan valor, bienamados. Es verdad que el humo del diablo ha penetrado en Mi Santuario, pero ¿qué humo dura para siempre? Yo, con el Aliento de Mi Espíritu Santo, disiparé y alejaré este humo y ninguna autoridad, ni ningún poder de abajo, será capaz de intervenir.

Vengo a traer Fuego a la Tierra y a purificar nación tras nación.

Sean benditos.