18.03.1991

Mensaje de Nuestra Santa Madre. Vassula Mía, he aquí Mi Mensaje Tengan Mi Paz. Hijos de Mi Corazón, Dios está en medio de ustedes y Su Reino está cerca. Si tienen ojos, lo verán. Queridísimos hijos, escuchen la Voz de Dios en estos días de Cuaresma. Escuchen la Voz de Dios, empequeñeciéndose ustedes mismos para que Dios pueda aumentar en ustedes. Anúlense para que Su Espíritu Sea visto en ustedes. Mueran a ustedes mismos, para que Dios pueda vivir en ustedes. Sean nada para que Él pueda ser Todo. Permítanle, de esta manera, que tome completa posesión de ustedes y haga de ustedes Su Propiedad. Así pues, hijos de Mi Corazón, les digo: mientras ustedes luchen por ser algo, el Espíritu de Santidad que quiere vivir en ustedes, es sofocado por su rivalidad. No dejen que su espíritu se convierta en un rival de Dios, disminúyanse para que Él aumente. Permitan a Su Espíritu que los forme, de esta manera, hacia el camino de la Santidad. Tengan presente en sus mentes que la humildad, la docilidad y el anularse a ustedes mismos son las virtudes claves para agradar a Dios, y con ellas se convierten en pobres de espíritu, y por lo tanto, irreprochables. Queridísimos hijos, Jesús fue Humilde, incluso para aceptar la muerte. Nunca sean como aquél que dice: "Yo tengo todo y lo sé todo, y no necesito el consejo de nadie". Manténganse pobres, sean pobres, para que en su pobreza, Dios pueda reinar en ustedes y Ser Rey. No permitan que ninguna presunción se apodere de ustedes. Mis plegarias son para que su santidad aumente en Aquel que los creó, y para que su amor por el prójimo aumente y se desborde, para purificar este mundo de su maldad y de su apostasía. Nunca dejen de rezar su Rosario, vengan con alegría a rezar el Rosario. El hombre rico no responderá, pero el pobre vendrá a Mí con su Rosario y, en su pobreza, Yo lo escucharé, mientras él reza esta sencilla oración, porque todo lo que es pobre y sencillo es mortal para Satanás, que es la Vanidad Misma. Esta es una de las principales razones por las que Satanás odia el Rosario. Satanás es poderoso, y ahora los está cribando a todos como al trigo, porque ésta es su hora, éste es el reino de las tinieblas. Permanezcan fieles a la Casa de Dios y guarden las Tradiciones que les han sido enseñadas y escuchen a Mi bienamado y bendito Vicario de Mi Hijo. A cada sacerdote se le ha dado la gracia de Dios, de actuar y representar a Mi Hijo, y por lo tanto, Yo oro por aquellos que todavía no se someten humildemente al Vicario de la Iglesia, para que se sometan y tengan buena disposición. Jesús es Fiel y Verdadero. Imiten a su Dios, Quien es la Perfección. Sean perfectos imitándolo a Él en Su Humildad, en Su Sumisión, en Su Obediencia, en Su Docilidad, para que ustedes también puedan recibir los mayores dones del Sufrimiento y de la Mortificación, los cuales los llevarán a la santidad y a Su Sagrado Corazón, que es su Morada Sacerdotes míos, sean como un campo que ha sido bien regado por frecuentes lluvias para que las ovejas de Jesús sean atraídos por sus pastos verdes y puedan tener algo de qué alimentarse. Ninguna oveja se siente atraída a pastar en cardos y zarzas. Permítanme reconstruir sus templos y hacerlos agradables a Dios. Dichosos los oídos que oyen y entienden lo que digo, porque les digo que no ha sido escrito el nombre de todos en el Libro de la Vida del Cordero Inmolado. Así pues, oren por aquellos que parecen no entender, ni están dispuestos a abrirse, para que ellos también reciban la Gracia de Dios, para que escuchen con sus oídos, para que comprendan con su corazón y así, convertirse y ver la Gloria de Dios. Mis queridísimos hijos, los bendigo a cada uno de ustedes. Los amo.