5.07.89

-¿Mi Señor?
-Yo Soy. La paz sea contigo.
-Señor, a veces es difícil.
-Mi Vassula, Yo sé que es difícil vivir en un desierto, pero recuerda que Mis Ojos no se apartan jamás de ti. Apóyate en Mí. Mis Palabras son las mismas de antes, Yo nunca he dejado de llamar a cada generación a la conversión. Con gran amor y piedad Yo os tenderé siempre Mi Mano. ¿Quieres proseguir Mis Obras de Amor?
-Sí, Señor. Lo estoy deseando si esta es Tu Voluntad.
-Es Mi deseo. Mi deseo es embellecer a cada alma en la tierra. Mi deseo es que cada uno guste Mi Pan. Yo os amo a todos. Mi deseo es colmaros, y gratuitamente. Mi deseo es hacer volver a los ateos a su sano juicio. Mi Vassula, siente Mi Sagrado Corazón, que nunca ha estado tan desgarrado y tan dolorido como en esta era tenebrosa.
-Oh mi Dios...
-Sin embargo, cuánto mayor es Mi dolor al ver que tantas almas se dirigen al fuego eterno... Comprende, Mi niña, que tus sufrimientos no son nada en comparación con los Míos. Permíteme descansar en ti. Estate en Paz.