31.11.1998

-Señor, déjame encontrar la alegría prometida al final de la senda que has trazado para mí. Para esto, Padre Recto, enséñame a ser revestida de rectitud y valor. ¡Oh, Señor! Tu Casa está siendo continuamente golpeada por la rebelión y no hay signos todavía de unificar las fechas de la Pascua. Realmente no son visibles, todavía no.... ¡Tú has convertido mi vida en una flauta sollozante desde el momento en que me bautizaste, sumergiéndome en el Lago de Agonía de Tu Corazón! Sí, sé que he sido llamada por el Divino Poder Mismo y que estoy en el abrazo de un Defensor Vivo, y que Él triunfará sobre todo el polvo de esta tierra. Pero tras mi despertar, todavía estoy en mi carne. Oh, Intérprete de mis pensamientos, no dejes que Tu arpa, como Tú me llamas, entone cantos fúnebres, pues cometería pecado. No dejes que tu afecto me pruebe tanto como lo hace ahora. -Hija, deja de parlotear. Ahora mismo estoy afectuosamente frente a ti, recordándote que es imposible estar en Mi compañía sin que Yo comparta contigo Mi Pasión y sin que tus rasgos se conviertan en los Míos. Ah, y en nuestra íntima unión, y en nuestro abrazo, Yo te he dado la unción de Mi Amor para convertirte en otro crucifijo viviente, en otra esclava para ser vendida al mundo. Si te sumergí en lo que correctamente llamaste el Lago de Agonía de Mi Corazón, mira lo que te ha traído este bautismo: ¡Qué fragancia! ¡Qué vestiduras imperiales! Yo te he tratado como trato a Mis elegidos. 1 "Mira, Yo te he estado vistiendo con Mi Hijo Jesucristo". "Y Yo 2 , Yo que soy la Puerta por la que los virtuosos entran al cielo, te digo solemnemente: permanece como un lirio, habiendo sido destilada por mirra pura en ese Lago de Agonía que, en realidad, representa las Lágrimas de Cristo, para que Nosotros digamos a nuestra bienamada: "cuán fragante es tu perfume, más fragante que todas las otras especias. Adornada con Nuestra inefable Luz, sigue esparciendo tu dulce fragancia para que halles la alegría prometida al final de la senda que Nosotros preparamos para Nuestra Esposa, allí encontrarás tu más precioso descanso en la Eternidad". Vassula Mía, esta agonía que tengo en Mi Corazón se debe, como te dije 3 antes, a que esta generación Me arrastra a la fuerza a nuevos Getsemaníes. ¿Qué más podría haber hecho Yo que no haya hecho? Aunque Mi condición era Divina, Me vacié a Mí Mismo para asumir la condición de esclavo. Yo serví. Y hasta el día de hoy ellos 4 no están satisfechos. Mi Casa está en ruinas, y Yo, ansioso por salvar a Mi gente de la ruina, con Mi Cetro Real, he levantado profetas para que asuman la condición de esclavos y sirvan voluntariamente a Mi Casa y la fortalezcan; esta Casa que he comprado con Mi Propia Sangre. Algunos de Mis pastores preguntarían: "pero ¿qué tenemos que hacer para que nuestras vidas Te sean aceptables?". Yo les he estado pidiendo oraciones y arrepentimiento de corazón para que se reconcilien Conmigo, su Dios: dejen su antiguo estilo de vivir y síganme, para que su vida sea aceptable a Mí, y así aumente en ustedes el Conocimiento de Nuestra Santidad Trina. Luego, déjenos conducirlos a contemplar una contemplación Nupcial en una Divina intimidad en Nuestro Abrazo. ¿Quieren entrar en la alegría de Nuestra Deidad Trinitaria? Entonces, clamen al Espíritu Santo, el Dador de Vida, el Dador de Carismas, el que ilumina sus corazones, que puede llenar todas las cosas sin estar contenido por sus límites, para que despliegue Su Poder en su alma ordenando que todas las cosas dentro de ustedes sean renovadas. Mediante Su Amor Benevolente y Su Gracia Él les mostrará Su Propio Poder Glorioso, mediante la transfiguración que Él puede realizar dentro de ustedes, dándoles la fuerza y la gracia necesaria para nunca rebelarse otra vez. Muchos 5 de ustedes que se sientan tras sus escritorios de dignatarios todavía preguntan: "¿Por qué Dios habría de intervenir cuando nuestra Iglesia ha sido enriquecida, desde hace ya tantos años, por el Espíritu Santo y por tantos de nuestros Santos?". "Para acabar con su rebelión y para acabar con su apostasía", es Mi respuesta. En Nuestra Bondadosa condescendencia, Nosotros nos hemos apiadado de ustedes. La Primavera Misma perfumará esta tierra, derramado fragancia y reavivando con Mi Aroma esta generación apóstata.... Y en cuanto a la unificación de las fechas de la Pascua, Vassula Mía, Yo estoy todavía a sus puertas esperando, como un mendigo esperando limosnas. Todavía, estoy esperando que unifiquen esas fechas.... Ellos siguen hablando sobre la unidad y la hermandad. Únicamente la conversión del corazón les llevará con humildad a la senda de la unidad. Yo te digo, le hice conocer a Mi Apóstol Pablo, mediante una revelación en su corazón, la importancia de la unidad y cómo preservar la unidad del Espíritu con la paz que los mantiene unidos. Le hice comprender también el orden de Mis Dones. Le revelé a él que Yo he otorgado a cada uno de ustedes Mi favor, distribuyéndolo en cualquier forma. Le he hecho saber que subí a las alturas, tomé cautivos, y di dones a la humanidad. Y para algunos Mi don fue que serían apóstoles; para otros, profetas; para unos, evangelizadores; para otros, pastores y maestros, para que todos juntos, con un solo corazón y una voz, construyeran Mi Cuerpo, la Iglesia. He levantado profetas con Mi Palabra y no son los se llaman a ellos mismos teólogos, los que son mis profetas, sino aquellos a los que elevo hasta Mi Corazón, incrustándolos bien dentro de Él para que alcancen el conocimiento más pleno de Nuestra Divina Voluntad y sean capaces de pronunciar Nuestra Voluntad a Nuestra gente. Yo personalmente les doy tributo con Mi intervención directa para prepararlos y darlos enteramente a todos ustedes, a fin de advertirlos. A través de Mi Palabra, les permito conocer Mi Voluntad. Mis profetas son aquellos que, por la Gracia, son nutridos directamente de Mi Boca y a los que coloco Mi Palabra directamente en su boca. Ellos vienen a todos ustedes goteando todavía con rocío celestial y sus palabras caen sobre ustedes como lluvia refrescante. Las palabras de Mis profetas que vienen con Mi intervención directa, son como una espada, para llevar a los apóstatas al arrepentimiento, dándome honor y gloria. Sus palabras flamean como antorcha en la oscuridad de su alma; muchos de sus huesos florecen de nuevo desde la tumba. 6 Si alguno pregunta: ¿Por qué enfatiza Nuestro Señor el lugar de Sus profetas?", diles esto: "Nuestro Señor dice: 'No le den vueltas a Mis Palabras para justificar su racionalismo. Renuncien a su pecado y sean felices; que sus almas se regocijen en la Misericordia de su Señor. 7 No persigan a Mis profetas, pues ellos son Mis ángeles que los consuelan a todos ustedes con Mi Palabra. Su función es advertirles y conducirlos a todos al arrepentimiento". Así pues, ahora es la hora del arrepentimiento. Renuncien a su pecado y encuentren Mi favor. ¡Ah, Vassula! Yo traje una semilla de Egipto para plantarla, ahí donde Mi enemigo le quitó a la tierra el suministro de alimento. Con ternura y cuidado le abrí un espacio, la ungí, y la planté. Ansioso por salvar a Mi gente de la ruina, fertilicé su suelo. Se enraizó y creció convirtiéndose en un árbol. Sus ramas se extendieron tan lejos como el mar; su fruto, abundante y suculento. Aunque a menudo fue visitado por truenos, huracanes y furiosas tempestades, él no se tambaleó. En tres años y pocos días, Mi enemigo temblaba y se estremecía. Ardiendo de ira, cargado con amenazas, levantó un ejército para cribar sus frutos con el tamiz de la destrucción, para refrenarlos con una brida; pero Yo reuní a cada uno de ellos y los escondí en Mi Corazón. Tan a menudo como los hombres han atacado Mi árbol, nunca lo han vencido pues Mi Bendición Trina estaba sobre él. ¡Ah..... y cuán a menudo los aradores se han puesto a trabajar en su espalda, haciéndole surcos para tirarlo! Pero Mi Mano Derecha ha destrozado su yugo, arrojándolos a todos a la confusión. ¡Benditas las naciones que encuentren abrigo bajo sus ramas y coman su fruto que he sellado con Mi Santo Espíritu! La Palabra de Vida te fue dada generosamente para que tú, a tu vez, Vassula Mía, la des liberalmente a los moribundos. ¡Ay de los que extienden su mano con fuego para destruir lo que Yo he plantado! Seguiré cubriéndote con Mi Dulzura, desplegándose bondadosamente en ti como una dulce substancia, para que el mundo entero guste Mi Dulzura. Deja que tus acusadores mueran como sombra que se desvanece. Yo, el Amante de la humanidad, tu Señor y tu Dios, te pido besarte con los besos de Mi Boca 8 perfumándote para que permanezcas siendo un deleite a Mi Vista. Sé buena. 1 De pronto, habló el Padre 2 Luego habló el Espíritu Santo 3 Mensaje del 11.11.98 4 Esta generación 5 "Muchos" no quiere decir "todos" 6 Comprendí que los profetas, nunca dejarán de ser enviados a nosotros. También el hecho de que el profeta Elías no murió nunca, sino que fue llevado de aquí, simboliza que la profecía nunca morirá. 7 Perseguir y condenar la intervención de Dios es un pecado mortal, porque están condenando a Su Misericordia. Lo que escribo a continuación fue tomado de Santa Catalina de Siena. El Padre le dictó: "Los hombres, continuamente, se escandalizan por Mis Obras, que son todas justas, y todas llevadas a cabo en la verdad, a través del amor y la Misericordia. Con este falso juicio, y con el veneno de la envidia y el orgullo, las Obras de Mi Hijo fueron difamadas e injustamente juzgadas, y con mentiras, sus enemigos dijeron: 'Este hombre obra por virtud de Belcebú'. Esos hombres malvados, firmes en su amor propio, impureza, orgullo y avaricia, y fundados en la envidia y en perversa irreflexión, con impaciencia, siempre se escandalizan de Mí y de mis siervos..." 8 Cantar de los Cantares 1,2