Sent: Monday, October 20, 2003 10:55 PM
Subject: Homilia del 25 Aniversario del Papa Juan Pablo II

Esta es la Homilía del Papa Juan Pablo II, durante la Misa que se celebró en la Plaza de San Pedro, el pasado jueves, en el veinticinco aniversario de su Pontificado. 

 


”Cuando llegó el tiempo para que él y los demás apóstoles vivieran esta misma misión, entonces ellos recordaron Sus Palabras. Se dieron cuenta de que solamente porque Él les había asegurado que sería Él Mismo Quien trabajaría a través de ellos, serían capaces de llevar a cabo su misión.

 

Especialmente conciente de esto estaba Pedro, “testigo de los sufrimientos de Cristo”, quien exhortó a los ancianos de la Iglesia: “Cuiden el rebaño de Dios que está a su cargo”.

 

En el transcurso de los siglos, los sucesores de los apóstoles, guiados por el Espíritu Santo, continuaron reuniendo al rebaño de Cristo y lo guiaron el Reino de los Cielos, concientes de que ellos podían asumir una responsabilidad tan grande, únicamente “a través de Cristo, con Cristo, y en Cristo”.

 

Tuve esta misma conciencia cuando el Señor me llamó a llevar a cabo la misión de Pedro, en esta bienamada ciudad de Roma, y al servicio del mundo entero. Desde el principio del Pontificado, mis pensamientos, oraciones y acciones estuvieron alentadas por un sólo deseo: dar testimonio de que Cristo, el Buen Pastor, está presente y trabaja en Su Iglesia. Él está en una búsqueda constante de cada oveja perdida, la lleva de regreso al rebaño, cura sus heridas, cuida a Sus ovejas débiles y enfermas y protege a las fuertes. Es por esto, que desde el primer día, nunca he dejado de exhortar: “¡No tengan miedo de darle la bienvenida a Cristo y aceptar Su Poder!  Les repito, con convicción, el día de hoy: “Abran, más aún, abran ampliamente las puertas a Cristo”.  Permítanse ser guiados por Él. ¡Tengan confianza en Su Amor!

 

Al inicio de mi Pontificado, les pedí: “¡Ayuden al Papa y a todos aquellos que desean servir a Cristo y, con el poder de Cristo, servir al hombre y a la humanidad entera!  Si bien doy gracias a Dios, junto con ustedes, por estos 25 años marcados enteramente por Su Misericordia, siento una necesidad especial de expresar mi gratitud también a ustedes, hermanos y hermanas de Roma y del mundo entero, quienes han respondido y continúan respondiendo, de diversas maneras a mi llamado de ayuda.  Sólo Dios sabe cuántos sacrificios, oraciones y sufrimientos han sido ofrecidos para sostenerme en mi servicio para la Iglesia. Cuánta buena voluntad y preocupación, cuántas señales de comunión me han rodeado cada día. ¡Que el Buen Dios les recompense abundantemente!  Les pido, queridos hermanos y hermanas, que no interrumpan esta gran labor de amor del Sucesor de Pedro. Les pido nuevamente: ¡Ayuden al Papa, y a todos aquellos que quieren servir a Cristo, para servir al hombre y a la humanidad entera!

 

A Ti, Señor Jesucristo,

Único Pastor de la Iglesia,

Te ofrezco los frutos de estos 25 años de ministerio

Al servicio del pueblo que me has confiado.

Perdona todo el mal hecho y multiplica lo bueno:

Todo es Tu Obra y sólo para Ti es la gloria.

 

Con plena confianza en Tu Misericordia,

Te presento, nuevamente, hoy, a aquellos que,

Hace años, me encomendaste a mi cuidado pastoral.

Guárdalos en amor, reúnelos en tu rebaño,

Carga a los débiles en Tus Hombros.

Cura a los heridos, cuida a los fuertes.

Sé Tú su Pastor, para que no se dispersen.

 

Protege a la Iglesia bienamada que está en Roma

Y a las Iglesias del mundo entero.

Penetra con la luz y el poder de Tu Espíritu,

A todos aquellos a quienes has colocado a la cabeza de Tu rebaño:

Que se apresuren a llevar a cabo su misión

Como líderes, maestros y santificadores,

Mientras esperamos Tu Glorioso Regreso.

 

Renuevo a Ti, por las Manos de María, Madre Bienamada,

El don de mi mismo, en el presente y en el futuro:

Que todo se cumpla de acuerdo con Tu Voluntad.

Pastor Supremo, permanece entre nosotros,

Para que podamos continuar seguros en Ti,

Hacia la Casa del Padre.

Amén. 

 

 

 

 

 

_______________________________________________
Si usted no desea continuar recibiendo estos
mensajes, responda a este correo, indicando, en el
Asunto del mismo, la palabra ELIMINAR.
Un archivo de correos anteriores enviados a este foro
puede verse en: http://www.tlig.org/sp/spforum/spforum.html
Para suscribirse a esta lista de correos: esp@tlig.org
______________________________________________