Sent: Thursday, November 28, 2002 2:36 PM
Subject: LECCION DE VASSULA EN EL ANIVERSARIO DE LA VVeD



En el aniversario número 17 de la Verdadera Vida en Dios, se envía,
nuevamente, el siguiente mensaje de Vassula, escrito hace dos años.


"Celebren, anualmente, la fecha de este día, en el que Yo te traje a ti y a
tantos otros, para que vengan dentro de Mi Corazón y descubran aquéllos
Innumerables Tesoros que Yo He guardado para sus tiempos. Tengan este día en
mente" (28 de noviembre de 1995).



28 de noviembre de 2000 - 15° Aniversario de la VERDADERA VIDA EN DIOS

Jesús nos pregunta a todos quienes vivimos una Verdadera Vida en Dios:
"¿Están contentos de haber estado Conmigo, de esta manera, durante todos
estos años?". Él continúa: "Ustedes se han vuelto parte de Mi y Yo parte de
ustedes, y han hecho su morada en Mi, como Yo he hecho Mi Morada en ustedes"
. Más adelante, en este mismo Mensaje, Jesús dice: "Mi Camino es recto. Mis
Maneras de acercarme a ustedes son agradables. Su Rey Es Perfecto y Hermoso"
.



Estas Palabras de Cristo deben ser vividas, aún más, por aquéllos quienes
han sido llamados a ser apóstoles de la Verdadera Vida en Dios. Cuando Él
dice: "Mi Camino es recto", Nuestro Señor espera que nosotros, por igual,
enderecemos nuestros caminos y seamos un ejemplo para los demás, ya que
somos y nos hemos convertido en parte de Él. Por lo tanto, ningún vicio debe
permanecer dentro de nosotros. Donde hay virtud, hay Luz; donde hay amor,
ahí Está Dios. Así que hago una súplica a todos aquéllos, quienes han sido
llamados a la Verdadera Vida en Dios, para que hagan un acto especial de
reconciliación. Si es el caso que en este día tienen un resentimiento contra
de alguien, por favor, por el bien de Jesús, vayan y reconcíliense en esta
fiesta de la Verdadera Vida en Dios, y ofrézcanle su acto a Jesucristo.



Yo sé que Él recibirá este gesto suyo como un ramillete de flores, como un
incienso apaciguador. Por lo tanto, vayan y hagan la paz con su hermano, con
el fin de poder decirle con toda honestidad a Dios: "Tu siervo está viviendo
Tu Mensaje, porque ya me he reconciliado e hice la paz Contigo". Al haber
hecho la paz con su hermano, también, han hecho la paz con Dios.



Vivan el Mensaje de Cristo, porque el permanecer sin reconciliarse, mientras
que predican la reconciliación, es como orar a Dios, sin sentirlo, sólo de
palabra. Nuestra Madre Bendita me dijo un día: "He venido a todos ustedes a
pedirles que se reconcilien con Dios, y unos con los otros. He venido a
recordarles a todos que un verdadero apóstol de Dios es aquél que hace la
Voluntad de Dios. Amar es hacer la Voluntad de Dios" (6 y 8 de diciembre de
1993). No decepcionen a Nuestra Madre Bendita manteniendo el resentimiento
en su corazón, como una serpiente enroscada. Seguramente, no querrán
escuchar que su Santa Madre les diga un día: "Cuando Yo los llamé a la
reconciliación, ya que todos son parte uno del otro, Yo no fui escuchada" (6
y 8 de diciembre de 1993).




Recibí un Llamado de Dios y le respondí. Él habló y yo le creí. Cuando Su
Obra empezó a extenderse, y Su cosecha se volvió próspera, se necesitaron
obreros. Así que el Padre, Que ve todas las cosas, te miró y te llamó. Tú
has respondido a Su Llamado, le respondiste y Él Estaba Complacido.


El haber respondido a Su Llamado fue una Gracia que te hizo florecer. Esta
Gracia fue un Don de Dios, emanado de Su Infinita Misericordia. Y como
Nuestro Señor dijo, entonces, Él nos formó para convertirnos en apóstoles de
estos fines de los tiempos.


El Señor nos dijo:



"Ha sido dicho que en el fin de los tiempos, Nuestros Dos Corazones (el de
Jesús y el de María) erigirán apóstoles, y serán llamados apóstoles del Fin
de los Tiempos. Estos serán instruidos por la Reina del Cielo y por Mi
Mismo, para que vayan a cada nación a proclamar, sin temor, la Palabra de
Dios. Aún cuando estén empapados con sangre, por los feroces ataques del
enemigo, no serán derrotados".



"Su lengua perforará a los enemigos de Mi Iglesia; como una espada de dos
filos, exponiendo sus herejías.  Ellos nunca se tambalearán, ni conocerán el
miedo, porque Yo les daré un espíritu de valor. El látigo destructor no los
atrapará. No dejarán ni una piedra sin voltear. Perseguirán a los pecadores,
a los arrogantes, a los grandes y a los orgullosos, a los hipócritas, a los
traidores de Mi Iglesia, los perseguirán con Mi Cruz en una mano y el
Rosario en la otra. Y, Nosotros, estaremos a su lado. Destruirán las
herejías y, en su lugar, construirán fidelidad y verdad. Ellos serán el
antídoto del veneno, porque brotarán como botones de flor del Corazón Real
de María" (3 de abril de 1996).



Pero, también, Nuestra Señora, Quien por igual, ha preparado varias cosechas
de Paz, alrededor del mundo, ha estado llamando a Sus hijos para que se unan
y oren con un sólo corazón. A algunos, a quienes Ella ha llamado, les ha
dado una tarea  especial de propagar Sus Mensajes. No sabemos cuando vendrá
el Señor a buscarnos. Así que tenemos que vivir cada día, como si fuera
nuestro último día en la Tierra.


Nuevamente, Jesús nos recuerda:

"Yo he venido en su ignorancia y les he encargado una tarea que va más allá
de sus medios. Yo les he dado a conocer Mi Sagrado Corazón a todos y
continuaré dándolo a conocer en este frío mundo, empapado en su propia
sangre, por sus crímenes. Permitiré que esta Fuente de Mi Sagrado Corazón
invada a este frío mundo, dándole vida, por dondequiera que pase, y Mi
Promesa será cumplida, porque Mi Espíritu Santo, el Dador de Vida, gobernará
esta sociedad malvada, y la convertirá en gente recta. Entonces, la santidad
y la justicia serán su consorte" (28 de noviembre de 1996).



Regocijémonos en el Señor para que el Paraíso nos invada. Permitamos al
Espíritu Santo enraizarse en medio de nuestro corazón, para transfigurar
nuestra alma, impregnándola con la Imagen de Cristo, una Imagen Divina.
Oremos, diciendo estas palabras que Nuestro Señor nos ha dado:



"Señor, danos Tu Reino,

para que obtengamos incorruptibilidad

y la deidad, para tener Vida Eterna".


Amén


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