7.02.1991
Mensaje para el mundo. La paz esté con ustedes. Yo Soy Jesús. Yo soy la Esperanza que el mundo está buscando. Esta Esperanza que ellos están buscando está a su alcance. Sólo tienen que extender sus manos hacia el Cielo y buscar las cosas celestiales; ellos podrían buscarme y Yo les respondería. No estoy ocultando Mi Rostro, ni estoy apartando Mis Ojos de ellos. Mis Ojos los observan a todos y examinan todos sus pasos. Mi Espíritu, en verdad, llena todo el mundo para iluminar esta oscuridad y dar Esperanza a todos aquellos que buscan a tientas su camino en esta noche interminable. Bienamados, siendo el Cielo su patria, y la tierra su peregrinación, tanto más razón para alegrarse y tener esperanza. Oh creación, ¿voy a despojarte de tu sudario de muerte y no llevarte a la vida? o Yo, que traigo a la vida ¿voy a enviarte de nuevo a la muerte? Yo soy Misericordia, Yo soy Amor. Alza tus ojos al Cielo para ver los Signos de los Tiempos. Yo vengo a reunir nación tras nación y a mostrar Mi Santo Rostro, a cada uno de ustedes y recordarles Mi Amor. Pero miren, el comienzo de las aflicciones ya ha empezado, y el principio de sus dolores de parto, también. Son testigos, desde que se convirtieron en creyentes, de que lo que leen en las Escrituras está haciéndose realidad: la efusión de Mi Espíritu, en estos últimos días de oscuridad, se está derramando pródigamente sobre la humanidad. Son testigos de cosas que eran enigmas y dichas con anterioridad en parábolas. Son testigos de la crueldad de Satanás, pero Yo les prometo, hijitos que pronto, después de sus sufrimientos (que se agravarán) vendrá el Gozo, y que después de sus dolores de parto, ¡el Amor nacerá en medio de ustedes! Pero hoy, miro con consternación, desde lo alto, los crímenes de esta generación, que han sobrepasado ahora los pecados de Sodoma y de Gomorra, porque sus esperanzas están edificadas en un falso Cristo. Esta generación es vil, rebelde, contaminada de sangre, y vive bajo la sombra de Satanás. ¡Oh era! Tu magnífica y presunta sabiduría ha construido una muralla dejándome fuera, porque sus pomposos corazones, llenos de arrogancia, se consideran iguales a Mí, su Dios. "¿Todavía vas a decir: soy un dios, cuando te encuentres frente a tus verdugos?". 1 Ya está corriendo sangre por sus calles. En su maldad, construyen sus esperanzas en todo lo que no soy Yo. Han puesto su esperanza en los hombres y no en Mí, en riquezas que no los salvan, haciendo de lado el Tesoro que Yo les ofrezco en el Cielo. Están construyendo sus expectativas sobre la humanidad basadas en una Mentira al creer que pueden lograrlo todo con sus propias fuerzas humanas. En efecto, 2 han acumulado grandes riquezas en sus ocupaciones, pero mañana morirán. Pocos son los que se preguntan: "¿Por qué el Señor y Su Madre descienden, de repente, sobre nosotros?". Y sólo un resto de Mis almas sacerdotales se interesan por Nuestras manifestaciones habituales. Yo he dicho que voy a enviar a Mi Mensajero para preparar un camino para Mí, 3 y esto es exactamente lo que Mi Madre, que es también su Madre, está haciendo. Las Escrituras se están cumpliendo y Yo les digo solemnemente que Aquél por quien Mis Abeles y Mis Jacobs suspiraban, vendrá de improviso, y entrará en Su Templo para extirpar los Caínes y los Esaúes que han hecho estragos y ruina de Mi Iglesia. Han industrializado Mi Casa, ¡esta Casa que debería haber sido una Casa de oración! ¡En verdad, han convertido Mi Casa en una guarida de ladrones! Si Yo soy como ustedes 4 dicen: "el Santo", entonces ¿dónde está el honor que Me deben? Si, en verdad, soy su Dueño, ¿dónde está el respeto hacía Mí? Si Yo soy su Dios, ¿dónde está la adoración y el incienso para Mí? ¿Dónde está la devoción a Mí? ¿Cómo es que no pueden leer los Signos de los Tiempos? ¿Cómo es que no pueden entender las cosas Celestiales? ¿Cómo es que ya no creen en Mis Prodigios? ¿Por qué persiguen a Mis Abeles y a Mis Jacobs, si bien no abiertamente, sí en secreto? Yo Me aparezco, al igual que su Santa Madre, y Nosotros nos manifestamos a través de almas, en muchas naciones, pero Nuestras manifestaciones los cansan e incluso los irritan. "¡Qué cansado es todo esto!", 5 dicen ustedes, porque hasta hoy no han entendido las cosas Celestiales como Mis Abeles y Jacobs. No, no han han comprendido Mi Amor, ni la devoción que le deben a Mi Madre. Ustedes llaman a la fe y confian en su fuerza, en su autoridad y en su razonamiento. Mi Voz, que llama hoy a los pecadores al arrepentimiento, molesta sus oídos. Cuando la Rectitud brilla de pronto sanando con Sus rayos, ustedes rehusan Mi Regalo que hoy se ofrece a su era de tinieblas. ¿Tengo que aceptar sus persecuciones una y otra vez? ¿Tengo que sacrificar año tras año a Mis Abeles y a Mis Jacobs, que son el incienso de Mis Altares y los pilares firmes de Mi Iglesia? Han cerrado sus oídos a Mi Voz para escucharse únicamente a ustedes mismos. Han privado a muchos de comer los frutos de Mis Nuevos Viñedos porque Satanás ha entrado en ustedes y emboscado su espíritu, y he aquí el resultado, otros están expiando por sus crímenes, 6 otros están expiando por su vanidad y su locura: Para salvarlos, todos los días, estas almas generosas les ofrecen sus mejillas, para ser abofeteadas, maltratadas y afligidas. Por ustedes, estas almas generosas expían con su propia sangre: para salvarlos. Yo estoy esperando oirlos, pero no están diciendo lo que deberían. Ustedes no se arrepienten, sino que se descarrían al seguir su camino, arrastrando a millones tras de ustedes. Van en busca de asientos y autoridad, pero no buscan conquistar y salvar almas, pero ustedes caerán... y esta continua apostasía cesará... y en ustedes, Mis Abeles y Mis Jacobs, Yo reconstruiré Mis altares, que una vez fueron, pero que ahora yacen en ruinas. Haré fluir de ustedes ríos de agua cristalina y su testimonio dará fruto, porque estas aguas manarán de Mi Fuente. Y como árboles de vida que crecen junto a este río Santo, Mis hijos prosperarán por su testimonio. Hijos, ánimo, Yo no los he abandonado, ni los he olvidado. Todo el que vive en Mí sentirá Mi Amor. Todo el que se alimente de Mí no será cortado para morir. Aquel que permanece en Mí vivirá. Yo, el Esposo, desciendo para desposarlos con Mi Paz y Amor, y recordarles que, desde el Principio, ustedes eran Míos. Yo, el Señor, los bendigo dejando el Suspiro de Mi Amor en sus frentes. Sean uno bajo Mi Santo Nombre. 1 Ez. 28,9 2 Dios se está refiriendo, en este pasaje, a la manera de pensar de la Francmasonería 3 Malaquías 3,1 4 Los Caínes y Esaúes 5 Malaquías 1,13 6 De pronto, la Voz de Jesús se volvió tierna y triste |